Amazon y todas las empresas basadas en internet monetizan activos digitales (sus plataformas) a partir de otros activos digitales; los datos de la gente, que sin embargo no pueden ser monetizados por los propios usuarios. Y ese es el verdadero problema digital.

Como ha ocurrido siempre necesitas clientes. Pero ahora más que nunca necesitas al cliente y ‘su circunstancia’; en forma de relaciones sociales, comentarios, valoraciones, etc. Todo ese grafo social se lo regalas a la empresa a cambio de que ésta lo amplíe con otros contactos.

Pero por el camino la empresa extrae contigo y todo el resto de usuarios mucho más valor del que todos (la sociedad) obtiene a cambio. La plataforma lo que hace en realidad es fabricar dinero con tus hábitos, con tu agenda, y con las interacciones que tienes con tu agenda.

De los usuarios no sólo se toma su dinero sino también sus datos. Y eso en el Siglo 21 es equivalente a decir ‘su vida’. Porque si tienes al cliente tienes sus datos, y si tienes sus datos tienes su futuro comportamiento.

En una transacción económica como comprar unos cascos en Amazon lo de menor valor son los cascos (que es lo que recibes), y el dinero que pagas por ellos. Lo que realmente cuenta son tus datos. O mejor dicho, el uso de tus datos: el que haces ahora para hacer la compra y todos los usos que harás en el futuro a medida que el algoritmo de la máquina te va conociendo mejor.